Más fuerte que el vinagre. Los mejores vinagres jerezanos que querrás probar
20.10.20 Irene S.
Este líquido de sabor agrio proveniente de la fermentación acética del alcohol, merece toda tu atención gastronómica.
Sus usos de sobra conocidos van desde la preparación de vinagretas, adobos, marinados, encurtidos y escabeches, hasta el aliño de deliciosas ensaladas, en las que puedes aportar una riqueza de matices, aromas y sabores utilizando un vinagre de calidad.
Es por ello que la elección de un buen vinagre puede marcar la diferencia en tus platos. Tenemos además la suerte de contar con una de las D.O. más importantes de este producto a nivel mundial, que no es otra que la de Jerez, lo que nos permite disfrutar de los mejores vinagres sin salir de la península.
Vinagre de Jerez Reserva – Bodega Delgado Zuleta
Galardonado con el premio VINAVIN Gran Oro, máximo galardón del concurso internacional de vinagres VINAVIN, este vinagre se elabora a partir de los vinos de Delgado Zuleta, mediante una crianza media de tres años en botas de roble americano.
Es la máxima expresión de los vinagres tradicionales del Marco de Jerez, conservando los matices de los jereces de la bodega sanluqueña.
La Bodega Delgado Zuleta nace en 1744, siendo la bodega más antigua del Marco de Jerez. Es ampliamente conocida por sus vinos generosos manzanilla, amontillado, palo cortado, oloroso, pedro ximénez y moscatel.
Vinagre Gran Reserva de Familia – González Byass
Este vinagre ha sido envejecido durante más de 10 años en botas de roble, con el sistema jerezano de Criaderas y Soleras.
Su intenso color caoba oscuro y sus aromas ricos con notas balsámicas, de vinos viejos y maderas nobles, le otorga una personalidad inigualable.
Un vinagre potente y muy elegante.
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1730 Vinagre de Jerez Reserva – Álvaro Domecq
De aspecto brillante y color castaño oscuro con matices ámbar, tiene un olor ligeramente punzante a acético pero vinoso, con notas de madera.
La finura y gran bouquet de este vinagre de Jerez se consigue con los 30 años de envejecimiento en excepcionales botas de madera.
En las bodegas Domecq apartan las botas de mayor acidez para la elaboración de vinagre a través de un proceso doble: el vino se acetifica por las bacterias acéticas y se produce el envejecimiento por crianza oxidativa. Este proceso dual aumenta en cada criadera el nivel de acidez y baja el alcohol residual, llegando a alcanzar en la solera una acidez total de 9,5%.
Vinagre Gran Reserva – Williams & Humbert
A partir de vino con Denomiación de Origen Jerez-Xérèz-Sherry criado y envejecido durante 10 años como mínimo, y aplicando prácticas tradicionales en la elaboración del vinagre, Williams & Humbert gesta su maravilloso Vinagre Gran Reserva.
Este vinagre de tonos dorados añejo goza de una presencia aromática muy notada y un sabor exquisito para el paladar, siendo ideal para aliños ensaladas.
Sin duda, un vinagre de Jerez de esta bodega que lleva en activo desde 1877 con el que vas a disfrutar sí o sí.
Vinagre Reserva Argüeso – Bodegas Argüeso
Siguiendo el mismo sistema tradicional de criaderas y soleras que emplean en la crianza de sus vinos, Bodegas Argüeso elaboran este magnífico vinagre incorporando vinos jóvenes de uva Palomino.
El Vinagre Reserva Argueso goza de una elaboración totalmente natural, y que gracias a la lenta acetificación de las bacterias acéticas que contienen el propio vinagre, se consigue un vinagre de Jerez de la máxima calidad.
En nariz llega a resultar muy aromático y con una marcada acidez, y su color ámbar oscuro le hace lucir de una manera ilustre. Además, la larga crianza en roble se hace presente con notas de madera vieja e intensa.
Perfecto para aderezar tus ensaladas o elaborar salsas para platos.
Vinagre en Rama – Ximénez Spínola
“Un error maravilloso, hecho de vino”. En la elaboración de un vino Pedro Ximénez de pasas pueden ocurrir algunas sorpresas, como la evolución de las micodemas en acetato natural y por tanto, en vinagre. Lejos de ser una mala noticia, es el inicio de un producto único.
Este vinagre se embotella sin filtrar y en las mismas condiciones en las que se extrae de las barricas, por lo que guarda aromas y sabores muy potentes, aunque suavizados por los años de crianza en roble.
Su tono es caoba intenso, puede que con alguna sedimentación leve de carácter natural al no haberse filtrado, de ahí su nombre de “en rama”. Su aroma transmite untuosidad, serenidad y armonía, y su sabor es intenso, amplio y prolongado, muy fiel a su origen de vino de Pedro Ximénez.